Aguja Cadier (3022 m)

Verano 2011

Nos despertamos pronto, muy pronto. Yo por suerte con la mano desinchada y bastante recuperada. El susto se había quedado en eso precisamente, en susto. Cargamos las mochilas con lo justo y nos pusimos en marcha en dirección a la Aguja Cadier, el único tresmil que haríamos durante la estancia de Pedro.

El camino es el típico al Balaitus por la brecha de Latour. Sobrepasamos la empinada rampa inicial que sale del refugio y continuamos sorteando todas las terrazas del terreno. Continuamos hasta el fondo del valle. Justo antes de doblar un contrafuerte desde el que veríamos la brecha de Latour, giramos hacia la izquierda en dirección al paredón de la Aguja Cadier y su canal/chimenea.

Amanece


Hacia la Aguja Cadier (I)


Hacia la Aguja Cadier (II)


Hacia la Aguja Cadier (III)


Infiernos


Hacia la Aguja Cadier (IV)


Hacia la Aguja Cadier (V)


Hacia la Aguja Cadier (VI)


Hacia la Aguja Cadier (VII)


Hacia la Aguja Cadier (VIII)


Hacia la Aguja Cadier (IX)


Hacia la Aguja Cadier (X)


Hacia la Aguja Cadier (XI)


Hacia la Aguja Cadier (XII)


Aparece la Aguja Cadier (I)


Aparece la Aguja Cadier (II)


Hacia la Aguja Cadier (XIII)


Hacia la Aguja Cadier (XIV)

En la entrada, había un nevero con una gran rimalla que hubo que sortear con mayor o menor fortuna. Comenzamos a trepar. la roca es mala y está muy descompuesta, exactamente como Latour. Por suerte este tramo es corto, y a partir de aquí la trepada mejora bastante. Hay que estar atentos a los hitos por que sino te puedes embarcar. Nosotros nos despistamos un poco y tuvimos que recular. Hay que ir al collado que queda entre la Aguja y la Frondella Norte.

A partir de aquí la cosa se complica y bastante. A Pedro le sonaba que la trepada era de II, pero yo creo que eso era III y muy expuesto. Y cuando digo expuesto es expuesto de cojones. Con muchísimo cuidado llegamos a la antecima, una especie de repisita a 3 metros de la cima. Es fácil, pero hay que estarse muy al loro.

Trepando (I)


Trepando (II)


Trepando (III)


Trepando (IV)


Trepando (V)


Trepando (VI)


Trepando (VII)


Trepando (VIII)


Trepando (IX)


Trepando (X)


Trepando (XI)


Trepando (XII)


Trepando (XIII)


Trepando (XIV)


Trepando (XV)


Trepando (XVI)


Trepando (XVII)


Trepando (XVIII)

Uno a uno recorrimos trepando los tres últimos metros hasta alcanzar la cima. La cima es pequeña hasta decir basta. Justo justo entran dos o tres personas y hay que tener mucho cuidado de no pegarle un golpe al de al lado para no mandarle al infierno. Se tiene una sensación muy aérea. Nos hicimos las fotos como pudimos y disfrutamos brevemente de las vistas, en especial del Balaitus.

Llegando a la cima (I)


Llegando a la cima (II)


Foto de cima (I)


Foto de cima (II)


Foto de cima (III)


Destrepando con cuidado


Minúscula cima


Balaitus


Frondellas


Infiernos entre otros


Gran Facha y Vignemale


Infiernos

Destrepamos con cuidado de nuevo hasta la base de la aguja Cadier, tras lo cual volvimos a hacer una pequeña parada.

Nos bajamos de la Aguja Cadier (I)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (II)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (III)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (IV)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (V)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (VI)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (VII)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (VIII)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (IX)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (X)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (XI)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (XII)


Nos bajamos de la Aguja Cadier (XIII)

Aún nos quedaba bajar al refugio para luego bajar al coche que estaba en la Sarra, osea, a tomar por saco. Así que bajamos rápidamente al refugio, pagamos y recogimos todo. Tocaba bajar con el mochilón hasta el coche.

Volvemos al refugio (I)


Volvemos al refugio (II)


Volvemos al refugio (III)


Volvemos al refugio (IV)


Volvemos al refugio (V)


Volvemos al refugio (VI)


Volvemos al refugio (VII)


Volvemos al refugio (VIII)


Volvemos al refugio (IX)


Volvemos al refugio (X)


Volvemos al refugio (XI)


Volvemos al refugio (XII)


Volvemos al refugio (XIII)

El barranco de Aguas Limpias es precioso, pero siempre se me hace eterno. Dejamos Respomuso, echando una última mirada a la Llena Cantal, y nos metimos de lleno en el barranco. Yo me entretuve a ratos comiendo y cogiendo frambuesas. Había muchísima y estaban buenísimas. Finalmente, cansados pero muy contentos llegamos a la Sarra, que estaba llena de gente y de coches. La vuelta a la civilización fue dura, muy dura, y ruidosa, muy ruidosa.

(Alguna de las fotos son de Pedro)

Dejamos Respomuso


Bajamos a La Sarra (I)


Bajamos a La Sarra (II)


Bajamos a La Sarra (III)


Bajamos a La Sarra (IV)


Helicóptero (I)


Helicóptero (II)


Bajamos a La Sarra (V)


Bajamos a La Sarra (VI)


Bajamos a La Sarra (VII)


Bajamos a La Sarra (VIII)


Bajamos a La Sarra (IX)


Bajamos a La Sarra (X)


Bajamos a La Sarra (XI)


Bajamos a La Sarra (XII)


Bajamos a La Sarra (XIII)


Bajamos a La Sarra (XIV)


Bajamos a La Sarra (XV)


Bajamos a La Sarra (XVI)


Bajamos a La Sarra (XVII)


Bajamos a La Sarra (XVIII)


Bajamos a La Sarra (XIX)


Bajamos a La Sarra (XX)


Bajamos a La Sarra (XXI)