Culebres (3051 m) y Vallibierna (3067 m)

Verano 2011

Después de venir de Punta Alta, nos fuimos a Llauset, como comentaba ayer. Está alta esa presa. la tarde estaba rara y hacía frío. Llegamos justo a tiempo para encontrar un sitio donde dormir y preparar la cena. Venía cambio de tiempo y estaba anunciado que quizás cayeran algunas gotas, pero por suerte no llovió en toda la noche.

Llauset (I)


Vista al valle


Atardecer (I)


Atardecer (II)


Atardecer (III)


Atardecer (IV)


Atardecer (V)


Atardecer (VI)


Atardecer (VII)

Tras una noche bonita y no demasiado fría, nos despertamos pronto, muy pronto. Aún en completa oscuridad, recogimos todo e hicimos un desayuno de fortuna, esto es, cuatro galletas y un te caliente en mi caso. Comenzamos a andar con los frontales. Solo se veían las estrellas y apenas se intuían las siluetas de las montañas. Poco a poco fuimos bordeando el embalse por la derecha hasta colocarnos al final del mismo.

Estrellas


En plena oscuridad (I)


En plena oscuridad (II)


En plena oscuridad (III)


En plena oscuridad (IV)


En plena oscuridad (V)

Comenzamos a ascender el largo valle que da acceso al collado de Llauset cuando las primeras luces del día empezaban a hacer acto de presencia. Este tramo es largo y se hace un poco pesado, ya que en todo momento se tiene el collado de frente y apenas hay vistas. Al final del valle, el camino se empina muchísimo y se descompone bastante, por lo que el caminar se hizo lento y dificultoso. De hecho, a tramos, el camino parecía como de mantequilla. Una cosa muy curiosa. Yo apreté el paso para evitar que el sol me pillara subiendo. Una carrera contra el sol jejejejeje. Llegué el primero, y detrás vinieron Ibán y Mikel.

Hacia el collado de Llauset (I)


Hacia el collado de Llauset (II)


Cruzamos el riachuelo


Hacia el collado de Llauset (III)


Hacia el collado de Llauset (IV)


Hacia el collado de Llauset (V)


Hacia el collado de Llauset (VI)


Hacia el collado de Llauset (VII)


Hacia el collado de Llauset (VIII)


Hacia el collado de Llauset (IX)


Hacia el collado de Llauset (X)


Valle de Llauset


El sol despunta


Al otro lado del collado


Llegan Rota y Mikel (I)


Llegan Rota y Mikel (II)

La ruta era larga así que no perdimos mucho tiempo en el collado. Nos pusimos de nuevo en marcha hacia la Tuca de Culebres. primero bordeamos hacia la derecha un contrafuerte, para posteriormente subirnos a dicho contrafuerte y comenzar un duro ascenso entre piedras, canaletas y resaltes rocosos. A pesar de la descripción es sencillo y nada expuesto. Tras unos 100 metros de ascenso, nos situamos justo debajo de la cima, a la que llegamos tras un brevísima trepada en travesía hacia la izquierda, hasta salir al pequeño cordal cimero que antecede a la Tuca de Culebres, el primer tresmil del día.

Hacia la Tuca de Culebres (I)


Hacia la Tuca de Culebres (II)


Hacia la Tuca de Culebres (III)


Hacia la Tuca de Culebres (IV)


Hacia la Tuca de Culebres (V)


Hacia la Tuca de Culebres (VI)


Hacia la Tuca de Culebres (VII)


Hacia la Tuca de Culebres (VIII)


Hacia la Tuca de Culebres (IX)


Tuca de Culebres

Ahora venía lo más interesante, el Paso del Caballo. había leído mucho sobre este paso, pero la verdad es que hasta que no lo ves no te haces a la idea. Se trata de un filito de mármol que separa la cima del Culebres del collado que antecede a la cima de la Vallibierna. Se llama el paso del Caballo por que casi todo el mundo lo pasa "a caballo". Visto desde el Culebres da mucho miedo. Es muy expuesto y la caída es mortal hacia uno de los lados, unos 300 metros de caída o más. Hacia el otro la ostia es importante también. Una vez que te acercas la cosa se ve más fácil. Hay muchos y muy buenos agarres para manos y pies. Yo decidí pasar en bavaresa por el lado de los 300 metros de caída. Es un subidón de adrenalina importante.

Ibán y Mikel no lo vieron claro, recularon y escaquearon el paso por la derecha, por una repisa cómoda que va a parar justo al otro lado del Paso del Caballo. Ahí nos volvimos juntar los tres. Un chico que venía detrás nuestro hizo el paso "a caballo".

Paso del Caballo (I)


Paso del Caballo (II)


Paso del Caballo (III)


Paso del Caballo (IV)


Paso del Caballo (V)


Paso del Caballo (VI)


Paso del Caballo (VII)


Paso del Caballo (VIII)


Paso del Caballo (IX)

Desde el collado, realizamos una pequeña trepadita para encaramarnos a la cima de la Vallibierna, el segundo tresmil del día. Impresionantes vistas, impresionante compañía e impresionantes fotos. Nos tomamos un respiro para beber y comer.

Hacia la Vallibierna (I)


Hacia la Vallibierna (II)


Hacia la Vallibierna (III)


Vallibierna


Panorámica desde la cima


Aneto


Aragüells

Como comenzaban a venir nubes, algunas amenazadoras, nos pusimos de nuevo en marcha. Primero, recorrimos todo el cordal de la Vallibierna, corto, bonito y disfrutón, y con unas vistas de infarto.

Por la cresta (I)


Por la cresta (II)


Por la cresta (III)


Por la cresta (IV)


Por la cresta (V)


Por la cresta (VI)


Estanyets de Coma Arnau (I)


Estanyets de Coma Arnau (II)


Observando la bajada


Maladetas


Estany Gelat

Tras el cordal, comenzamos a descender rápidamente en dirección a los Estanyets de Coma Arnau. En plena bajada nos encontramos con un grupo bastante grande, con niños y adolescentes. Tenían idea de hacer el paso.... mucha gente, demasiada gente. Menos mal que habíamos madrugado, sino, nos hubiéramos encontrado el grupo en medio del fregao y hubiera sido un auténtico caos.

Continuamos bajando buscando los hitos y el camino más fácil. Por fin llegamos al Estanyets. Es un sitio muy bonito, un rincón tranquilo y de gran belleza. Ahí realizamos una larga parada, con baño incluido.

Bajamos a los Estanyets de Coma Arnau (I)


Bajamos a los Estanyets de Coma Arnau (II)


Vista atrás (I)


Bajamos a los Estanyets de Coma Arnau (III)


Vista atrás (II)


Bajamos a los Estanyets de Coma Arnau (IV)


Bajamos a los Estanyets de Coma Arnau (V)


Estanyets de Coma Arnau (I)


Estanyets de Coma Arnau (II)


Estanyets de Coma Arnau (III)


Estanyets de Coma Arnau (IV)

En un momento dado, Mikel dijo "buf, vaya nubes más raras y que mala pinta tienen". Así que recogimos todo y nos pusimos en marcha, que no era plan de comernos una tormenta. Fuimos descendiendo poco a poco, y fuimos buscando el camino a Llauset por el Estany Botornás. Una vez en la cabaña de Botornás, descendimos a Llauset, y regresamos hasta la cabecera de la presa bordeando de nuevo Llauset.

Volvemos a Llauset (I)


Volvemos a Llauset (II)


Volvemos a Llauset (III)


Volvemos a Llauset (IV)


Volvemos a Llauset (V)


Volvemos a Llauset (VI)


Volvemos a Llauset (VII)


Volvemos a Llauset (VIII)


Llegando al Estany Botornás


Estany Botornás (I)


Estany Botornás (II)


Estany Botornás (III)


Volvemos a Llauset (IX)


Cabaña Botornás


Volvemos a Llauset (X)


Volvemos a Llauset (XI)


Volvemos a Llauset (XII)


Volvemos a Llauset (XIII)


Volvemos a Llauset (XIV)


Volvemos a Llauset (XV)


Volvemos a Llauset (XVI)


Volvemos a Llauset (XVII)


Volvemos a Llauset (XVIII)


Volvemos a Llauset (XIX)

Una vez en el coche, recogimos todo bien y comimos algo. Cuando estábamos de relax, en los postres, el cielo se ennegreció por completo y comenzó a chispear. En ese momento Mikel se puso nervioso y dijo que mejor que nos marcháramos, que aquello tenía muy mala pinta. Y que razón tenía. Fue comenzar a descender por aquella carretera del demonio y ponerse a granizar de la reostia. Dios que granizada. No paraba, y eran gordos de cojones.

El caso es que cuando nosotros nos marchamos, todo el grupo chavales, padres, madres, etc aún estaban en el monte y no se les veía por la zona de Llauset. Se comieron toda la tormenta seguro. No quiero ni imaginarme las escenas de pánico, lloros, etc. Un marronazo. Una vez en el fondo del valle, pudimos comprobar que todo el Pirineo era una tormenta gigante.

Teníamos pensado subir al día siguiente los Besiberris, durmiendo en la cabaña libre, pero con la previsión que había de mal tiempo, y que no paraba de llover y granizar, decidimos cambiar de plan, coger el coche e ir regresando a casa pasando por Candanchú y el Pico de los Monjes. La putada fue que en Candanchú estaba cayendo el diluvio universal cuando llegamos nosotros...

(Alguna de las fotos son de Ibán y Mikel)

Tormenta (I)


Tormenta (II)


Tormenta (III)