Mogota de Cervunal (2426 m)

Semana Santa 2015

Tras la subida al Torozo, nos acercamos hasta un área de parking que hay en Navalperal de Tormes, donde dormimos con la furgoneta. Al día siguiente saldríamos de ese mismo lugar, junto al río Tormes, en dirección a Mogota de Cervunal.

Madrugamos mucho, con un frío del demonio y la humedad metida en los huesos. Cogimos todos los bártulos y nos pusimos en macha tras un frugal desayuno. Atravesamos el Tormes y por camino ancho recorrimos la garganta de Gredos, que no es más que la confluencia de los arroyos de Cervunal, que baja desde la Laguna Grande, y el arroyo que baja de las Cinco Lagunas.

Amanece (I)


Amanece (II)


Cruzamos el Tormes (I)


Cruzamos el Tormes (II)


Amanece (III)


Garganta de Gredos (I)


Garganta de Gredos (II)


Garganta de Gredos (III)


Navalperal de Tormes queda atrás


Garganta de Gredos (IV)


Garganta de Gredos (V)


Garganta de Gredos (VI)


Garganta de Gredos (VII)


Nuestro objetivo a lo lejos (I)


Nuestro objetivo a lo lejos (II)


Garganta de Gredos (VIII)


Arroyo de Cervunal

Tras llegar a la confluencia de ambos arroyos, abandonamos las gargantas y nos fuimos encaramando al largo cordal que nos llevaría a lo alto de la montaña. El cordal es cómodo, con cómodo sendero, sin grandes desniveles pero con varias lomas que hay que ir subiendo y bajando, tomando poco a poco altura, siempre con nuestro objetivo frente a nosotros.

Ascendemos al cordal (I)


Por el cordal (I)


Por el cordal (II)


Por el cordal (III)


Por el cordal (IV)


Por el cordal (V)


Por el cordal (VI)


Por el cordal (VII)


Por el cordal (VIII)


Por el cordal (IX)


Por el cordal (X)


Por el cordal (XI)


Mogota de Cervunal aún lejos (I)


Mogota de Cervunal aún lejos (II)

Tras varios kilómetros por la loma, llegamos a la Hoya Nevada, una inmensa llanura con aspecto de turbera rodeada de lomas y donde hay un pequeño refugio, y cerca de este refugio, que está al final de la llanura, una pequeña laguna
escondida.

En este punto nosotros la cagamos miserablemente. Ante nosotros teníamos tres alternativas. Por la izquierda, un pequeño cordal que parecía incómodo. En el centro, un pequeño circo, pedregoso y con algo de nieve. A la derecha, una loma, en principio sencilla y por donde se suponía que había un sendero. Nosotros tomamos esta última alternativa.

Hacia la Hoya Nevada (I)


Hacia la Hoya Nevada (II)


Hacia la Hoya Nevada (III)


Hacia la Hoya Nevada (IV)


Hoya Nevada (I)


Grupo de cabras montesas (I)


Grupo de cabras montesas (II)


Grupo de cabras montesas (III)


Hoya Nevada (II)


Hoya Nevada (III)

El sendero comienza detrás del refugio, donde hicimos una parada técnica para comer algo. En un principio el sendero no ofrecía dificultad alguna, pero poco a poco se fue adentrando en un bosque de escobas, cada vez más cerrado, más incómodo. Un horror. Con mucho esfuerzo por nuestra parte conseguimos salir de ahí, para alcanzar una zona de lajas de piedra, más cómoda y con algo más de nieve.

Poco a poco nos fuimos acerdando a Dos Hermanitos, dos promontorios de piedra separados de Mogota de Cervunal por un amplio collado. Ya aquí teníamos continuidad de nieve y nos pudimos poner los crampones para progresar más rápidamente.

Hacia Dos Hermanitos (I)


Hacia Dos Hermanitos (II)


Hacia Dos Hermanitos (III)


Hacia Dos Hermanitos (IV)


Hacia Dos Hermanitos (V)


Hacia Dos Hermanitos (VI)


Hacia Dos Hermanitos (VII)


Hacia Dos Hermanitos (VIII)


Hacia Dos Hermanitos (IX)


Hacia Dos Hermanitos (X)


Hacia Dos Hermanitos (XI)


Hacia Dos Hermanitos (XII)


Hacia Dos Hermanitos (XIII)


Hacia Dos Hermanitos (XIV)


Hacia Dos Hermanitos (XV)

Bordeamos finalmente Dos Hermanitos y fuimos directamente al collado, y en fuerte pendiente, comenzamos la ascensión final a la cima de Mogota de Cervunal, a la que llegamos en completa soledad y bastante agotados. La ruta hasta la cima es bastante larga, pero mereció la pena por las estupendas vistas.

Subimos a Mogota de Cervunal (I)


Subimos a Mogota de Cervunal (II)


Subimos a Mogota de Cervunal (III)


Subimos a Mogota de Cervunal (IV)


Subimos a Mogota de Cervunal (V)


Subimos a Mogota de Cervunal (VI)


Subimos a Mogota de Cervunal (VII)


Subimos a Mogota de Cervunal (VIII)


Subimos a Mogota de Cervunal (IX)


Subimos a Mogota de Cervunal (X)


Laguna Cimera


Subimos a Mogota de Cervunal (XI)


Subimos a Mogota de Cervunal (XII)


Subimos a Mogota de Cervunal (XIII)


Subimos a Mogota de Cervunal (XIV)

Descansamos casi una hora en la cima, comimos, bebimos, sacamos fotos, disfrutamos del circo de las Cinco Lagunas, las lagunas heladas, el Almanzor a lo lejos. Una pasada.

En la cima (I)


En la cima (II)


En la cima (III)


En la cima (IV)


Panorámica desde la cima


Almanzór a lo lejos

Por desgracia había que volver, y el camino de vuelta era igualmente largo. En vez de volver por donde habíamos subido, decidimos bajarnos al collado del Pluviómetro, y de ahí bajar a las Cinco Lagunas y regresar a Navalperal de Tormes. No sabíamos si podríamos bajar, no sabíamos cómo estaba de nieve, ni cómo estaba la nieve... Tras asomarnos al portillo, vimos que era factible bajar por ahí, con cuidado.

Con crampones y piolet, comenzamos a descender por la empinada pendiente. Únicamente al inicio estaba la nieve muy dura, justo donde más pendiente había. Fuimos descendiendo poco a poco, prestando atención a las señales que nos enviaba la nieve, y abriendo huella (fuimos en paralelo a otra que ya estaba hecha) conseguimos alcanzar las lagunas. Llegamos a la más baja (Laguna Bajera), donde nos descalzamos los crampones y guardamos el piolet.

Hacia el collado del publiómetro


Descenso a las 5 lagunas (I)


Descenso a las 5 lagunas (II)


Descenso a las 5 lagunas (III)


Descenso a las 5 lagunas (IV)


Descenso a las 5 lagunas (V)


Descenso a las 5 lagunas (VI)


Descenso a las 5 lagunas (VII)


Descenso a las 5 lagunas (VIII)


Descenso a las 5 lagunas (IX)


Descenso a las 5 lagunas (X)


Descenso a las 5 lagunas (XI)


Descenso a las 5 lagunas (XII)


Descenso a las 5 lagunas (XIII)


Descenso a las 5 lagunas (XIV)


Descenso a las 5 lagunas (XV)


Descenso a las 5 lagunas (XVI)


Descenso a las 5 lagunas (XVII)


Descenso a las 5 lagunas (XVIII)

Ya solo quedaba recorrer toda la Garganta del Pinar, que es larguísima, pero muy bonita, con cascadas, cabras montesas...pero larga, larga, laaaarga. En mitad de la garganta nos encontramos un refugio del antiguo ICONA, y hacia el final de la garganta nos topamos con un rebaño enorme de cabras montesas, que nos ofrecieron bonitas estampas para las fotos.

Continuamos descendiendo hasta la confluencia de las dos gargantas, lugar que en la subida abandonamos para encaramarnos al cordal, y girando a la izquierda, tomamos el camino que nos llevaría al coche.

Por la Garganta del Pinar (I)


Por la Garganta del Pinar (II)


Por la Garganta del Pinar (III)


Por la Garganta del Pinar (IV)


Por la Garganta del Pinar (V)


Por la Garganta del Pinar (VI)


Por la Garganta del Pinar (VII)


Por la Garganta del Pinar (VIII)


Por la Garganta del Pinar (IX)


Por la Garganta del Pinar (X)


Cabra montesa


Cabras montesas (I)


Cabras montesas (II)


Por la Garganta del Pinar (XI)


Por la Garganta del Pinar (XII)


Por la Garganta del Pinar (XIII)


Por la Garganta del Pinar (XIV)


Por la Garganta del Pinar (XV)


Por la Garganta del Pinar (XVI)


Por la Garganta del Pinar (XVII)


Cabra solitaria


Por la Garganta del Pinar (XVIII)


Refugio de ICONA (I)


Refugio de ICONA (II)


Continuamos por la garganta (I)


Continuamos por la garganta (II)


Continuamos por la garganta (III)


Continuamos por la garganta (IV)


Continuamos por la garganta (V)


Rebaño de cabras montesas (I)


Rebaño de cabras montesas (II)


Rebaño de cabras montesas (III)


Rebaño de cabras montesas (IV)


Rebaño de cabras montesas (V)


Rebaño de cabras montesas (VI)


Rebaño de cabras montesas (VII)


Rebaño de cabras montesas (VIII)


Rebaño de cabras montesas (IX)


Rebaño de cabras montesas (X)


Rebaño de cabras montesas (XI)


Rebaño de cabras montesas (XII)


Vista atrás (I)


Vista atrás (II)


Continuamos por la garganta (VI)


Continuamos por la garganta (VII)


Continuamos por la garganta (VIII)


Continuamos por la garganta (IX)


Continuamos por la garganta (X)


Continuamos por la garganta (XI)


Continuamos por la garganta (XII)


Continuamos por la garganta (XIII)


Continuamos por la garganta (XIV)


Continuamos por la garganta (XV)


Llegando a Navalperal de Tormes